Unos padres venezolanos, Oscar Hernández y Jessica, acudieron a la Fiscalía General del Estado a denunciar que en el hospital del IMSS de la región 510, murió su hijo por el mal tratamiento que le hicieron; se llamaba Armando Castro, de 13 años, era un niño con autismo y tenía una irritación cerebral de nacimiento, recibió un balazo en la espalda y su tratamiento duró, desde el 8 de agosto hasta el 18 de septiembre, al cual le hicieron varios exámenes y un lavado en el que Salió una bala que estaba en su intestino, cuya respuesta del urólogo fue evadir su responsabilidad al decirle a los papás que su trabajo era ver los riñones.
El niño que padecía autismo terminó muriendo y los padres hasta el momento no les han entregado el resultado de la necropsia de ley, lo cual no se explican e insisten en que les den la cara las autoridades correspondientes, para que se esclarezcan los hechos: “porque alguien tiene que pagar”, afirmó el marido, quien dijo que el día 17 de septiembre, en la noche, recibió una amenaza, de la que ya dio una explicación a la Fiscalía.
Todo se derivó de que esta pareja fue atacada a balazos en el interior del hotel Royalton, donde la señora trabajaba y el marido fue por ella, en su camioneta, a recogerla; ellos nos siguieron en un vehículo disparándonos, hasta la fecha no sabemos porque nos hicieron esto; mi esposo se bajó del carro, se entregó y les dijo ya basta; el carro se quedó justo al lado de la pluma, las dos personas se bajan, nos apuntan y se dan cuenta de que no somos las personas que buscaban”, agregó la esposa, de nombre Jessica.
Señaló que estas dos personas se percataron que su hijo y su hija que también recibió balazos, estaban heridos y se regresaron al interior del hotel; en las cámaras de vigilancia no aparece el vehículo de la parte de la entrada de personal de donde yo Sali; fácil hay cuatro kilómetros de la caseta de la entrada al lobby”, agregó la señora
El padre comentó que él llegó en su camioneta Voyager 97, color verde y el vehículo que los atacó era un Aveo azul, eso fue el 8 de agosto; “la empresa en la que yo trabajo me dijeron que me iban a dar el seguro, hasta ahí y no me iban a pagar mi salario ni nada; ni gerencia, ni mi jefe directo me hablaron simplemente me dijeron que estaba el trabajo ahí para cuando yo quisiera regresar; tenía poco trabajando ahí”, pronunció la esposa.
El padre recalcó que lo que quieren es justicia y los resultados de la necropsia de ley, su hijo murió el 18 de septiembre; “el primer resumen dice causa de muerte una asepsia abdominal, una infección grave. Nos retiramos, nos llevamos al niño, pero porque a la fecha de hoy 5 de octubre no aparece la necropsia de ley”, aseguró.
Su hija que también recibió un impacto de bala en un brazo, la cual cumplió 12 años estando en el IMSS, perdió la movilidad de los dedos el índice y el pulgar y le limitó la movilidad del brazo derecho; “cosa que le ha afectado mucho porque es muy buena pintora y ahora no puede hacer sus dibujos; “le tuvieron que abrir su pierna derecha para hacerle un bypass de venas y arterias en el brazo derecho”, mencionó doña Jessica
A la niña la dieron de alta, pero está mal psicológicamente, necesita rehabilitación y tiene dos dedos que están fríos de su mano derecha y tiene limitada la movilidad de sus dedos principales de la mano
El marido, de nombre Oscar Hernández, que fue militar, concluyó al declarar que no quiere pedir ayuda a su gobierno de Venezuela, porque todos los ex militares como él, no les hacen caso y prefiere seguir luchando aquí, porque todo lo que sucedió, recalcó que fue porque CANClos confundieron y no tiene miedo a pesar de que ya le quitaron la mitad de su vida, al perder a su hijo
Por: Román Martínez
